Vuelo I

Desde hace unas semanas emprendí el vuelo, tomé mis ideologías, mi poco o mucho valor y mis ganas, -que últimamente no son constantes- el viaje comenzó sin un rumbo fijo, ahora ya tiene escalas definidas, pero para no variar y dejar de ser yo, sigo preguntando en mi interior: " Y si mejor me voy al campo, a seguir comiendo flores, para no dañar a nadie, o al monte, a donde me llevé la vida", muchos ya saben hacía donde voy...

"FORMAS DE COMER FLORES"

"CATARSIS"

Me he tomado muy enserio eso que leí hace 2 años, "antes de los 30 años se adquiere todo lo que nos define por el resto de nuestras vida" Muy seguramente mi cabeza adapto el verso que leí a su conveniencia, ya sea para darme tantita paz -que no lo creo- o para presionarme. Entonces después de 2 años de caminar sobre el camino amarillo, mientras me frustraba poquito a poco, me puse a hablar conmigo, así escupiendo todo lo que me tenía sufriendo, y me dije lo que ya sabía desde antes: "Ximena tu quieres hacer otra cosa, cambia de rumbo. Tú no eres para caminar, a ti lo que te gusta es volar" entonces, pusé al tanto a quienes me acompañan en el viaje, medio atolondrada di rutas sin pensar, pero de la misma forma en que las construí, cayeron por falta de una buena logística. Entonces me puse a trazar una ruta clara, tomando en cuanta lo que realmente me hace sentir útil y poniendo sobre la mesa mis capacidades intelectuales, porque para como soy me estoy dando la última oportunidad de volar. 

Este vuelo pretende bajar en el campo y comer flores, pero sólo a ratos, para no perder el sabor tan rico que me hace volver, porque cada que me olvido de las simplezas caigo en problemas, sin embargo; la ciudad le da sentido a mi existencia, me da los medios para tener bríos y regresar a las flores...